Mejorar el color de tus dientes , es posible a día de hoy gracias a los procedimientos clínicos de blanqueamiento dental , que nos permite aclarar varios tonos el color original de los dientes para que éstos tengan un aspecto más blanco y brillante.

Suele realizarse el tratamiento usando un gel de peróxido de carbamida y peróxido de hidrógeno en distintas concentraciones.

El blanqueamiento perdura en el tiempo pero no es para siempre pues los hábitos alimenticios, el tabaco, las bebidas (té, café,..), la propia saliva pueden volver a mancharlo pero en general se mantiene de forma satisfactoria varios o muchos años.

Normalmente, produce una sensibilidad moderada, soportable, mientras se está en tratamiento. Habitualmente es momentáneo y se soluciona de forma espontánea. Es posible que en algún paciente con sensibilidad extrema pueda sentir dolor, pero se produce como la sensibilidad a un helado o a una bebida muy fría… En ocasiones es necesario hacer algún tipo de medida ya sea referente a modificar la pauta de tratamiento o utilizar colutorios o pastas dentífricas que colaboren en hacer que la sensibilidad se atenúe y llegue a desaparecer.